- El Real Decreto 444/2024 regula a los influencers en plataformas como YouTube, Instagram y TikTok, exigiendo el cumplimiento de criterios específicos de ingresos y audiencia.
- Los influencers con ingresos superiores a 300.000 euros anuales o más de un millón de seguidores deben inscribirse en un registro estatal para garantizar la transparencia.
- La normativa refuerza la protección de menores, prohibiendo la promoción de productos como tabaco, alcohol y juegos de azar.
- El decreto busca profesionalizar el sector, promoviendo un entorno más transparente y ético en el ámbito audiovisual.
Objetivo y ámbito de aplicación
El Real Decreto 444/2024, conocido como la «Ley de Influencers», se aprobó en mayo de 2024 con el fin de regular a los usuarios de especial relevancia en plataformas de intercambio de vídeos como YouTube, Instagram y TikTok. Este decreto desarrolla el artículo 94 de la Ley 13/2022, de 7 de julio, General de Comunicación Audiovisual, estableciendo criterios específicos para determinar qué usuarios deben cumplir con obligaciones adicionales debido a su influencia y alcance.
Requisitos de ingresos significativos
Uno de los criterios fundamentales del decreto es la definición de ingresos significativos. Según el artículo 2 del Real Decreto, se considera que un usuario tiene ingresos significativos si genera 300.000 euros anuales o más de su actividad en plataformas de intercambio de vídeos. Estos ingresos pueden provenir de diversas fuentes como comunicaciones comerciales, pagos de plataformas, cuotas de audiencia y subvenciones públicas.
Este umbral garantiza que solo los usuarios con una actividad económica sustancial sean objeto de esta regulación, buscando equilibrar la carga regulatoria y centrarse en aquellos con un impacto económico considerable.
Requisitos de audiencia significativa
Además de los ingresos, el Real Decreto establece criterios de audiencia significativa. Según el artículo 3, un usuario debe tener al menos 1.000.000 de seguidores en una plataforma o 2.000.000 en varias plataformas para ser considerado de especial relevancia, además de haber publicado un mínimo de 24 vídeos en el año anterior.
Estos requisitos aseguran que solo los usuarios con una presencia significativa y constante sean regulados, lo cual es crucial para garantizar que aquellos con gran influencia cumplan con las obligaciones establecida.
Inscripción en el Registro Estatal
Los influencers que cumplan con los requisitos de ingresos y audiencia deben inscribirse en el Registro Estatal de Prestadores del Servicio de Comunicación Audiovisual. Esta inscripción busca garantizar la transparencia y el cumplimiento normativo, permitiendo a las autoridades monitorizar a estos usuarios de manera efectiva.
El proceso de inscripción es sencillo y se realiza a través del portal oficial del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital. Los influencers deben proporcionar información detallada sobre sus ingresos, audiencia y actividad, respaldada por documentación como informes de ingresos y estadísticas de seguidores. La inscripción facilita la implementación de medidas de protección, especialmente para los menores de edad, y asegura que las comunicaciones comerciales cumplan con las normativas vigentes.
Protección del menor como prioridad
El Real Decreto 444/2024 enfatiza la protección de los menores, exigiendo a los creadores de contenido que cumplan con las obligaciones de protección de menores y las normas de comunicación comercial audiovisual. Según el artículo 88 de la Ley 13/2022, los prestadores de servicios de intercambio de vídeos deben adoptar medidas para proteger a los menores de contenido que pueda perjudicar su desarrollo físico, mental o moral.
Los influencers deben asegurarse de que su contenido no sea dañino para los menores y deben implementar medidas adecuadas para proteger a este grupo vulnerable. Además, deben cumplir con las normativas sobre comunicaciones comerciales, garantizando que sean claras, veraces y no engañosa.
Impacto en el ecosistema audiovisual
La implementación del Real Decreto tiene un impacto significativo en el ecosistema audiovisual, buscando crear un entorno más equilibrado y justo. Al regular a los influencers, se promueve la transparencia y la responsabilidad en las plataformas de intercambio de vídeos, asegurando que aquellos con gran influencia actúen de manera ética.
Desafíos y oportunidades para los influencers
Para los creadores de contenido, esta normativa presenta desafíos y oportunidades. Por un lado, aquellos que cumplan con los requisitos de ingresos y audiencia deben adaptarse a nuevas obligaciones regulatorias, lo que puede implicar cambios en la gestión de sus ingresos, contenido e interacciones con el público. Por otro lado, la regulación ofrece oportunidades para profesionalizar la actividad de creación de contenido, mejorando la credibilidad y confianza de los usuarios, marcas y anunciantes.
Recomendaciones para el cumplimiento
Para asegurar el cumplimiento de la normativa, los creadores de contenido deben:
- Evaluar exhaustivamente sus ingresos y audiencia para determinar si cumplen con los requisitos establecidos.
- Inscribirse en el Registro Estatal si cumplen con los criterios de relevancia.
- Implementar políticas y procedimientos para garantizar el cumplimiento continuo de las obligaciones regulatorias, enfocándose en la protección de menores y la transparencia en las comunicaciones comerciales.
Actualidad y efecto real sobre los influencers
El plazo para inscribirse en el Registro Estatal finalizó el 2 de julio, y actualmente hay 54 creadores de contenido registrados. El Real Decreto 444/2024 representa un avance significativo hacia la regulación de los servicios de intercambio de vídeos en España, estableciendo requisitos claros para los usuarios de especial relevancia y asegurando que las comunicaciones comerciales sean transparentes y veraces.
Entre las principales obligaciones de los influencers registrados se encuentra la prohibición de promocionar tabaco, alcohol, medicamentos o juegos de azar, además de la catalogación de los vídeos por edades.
En resumen, el Real Decreto 444/2024 no solo regula a los influencers, sino que también establece un marco para la profesionalización y responsabilidad en el ámbito de la creación de contenido, beneficiando tanto a los consumidores como a la industria en general.