- La protección y privacidad de los datos se presentan como el mayor desafío para la implementación de las finanzas abiertas.
- Un nuevo marco normativo en la UE busca garantizar un acceso seguro a los datos de los clientes, manteniendo la confianza de los consumidores.
- El interés de los usuarios por compartir datos aumenta si reciben reducciones en comisiones o beneficios materiales.
- La PSD3 establecerá derechos y obligaciones para reforzar el control de consumidores y empresas sobre sus datos financieros.
El Informe Open Finance de Minsait Payments destaca que la protección de datos es el principal obstáculo que enfrenta la expansión de las finanzas abiertas o Open Finance. Este concepto, que permite un acceso más abierto y seguro a los datos financieros de los clientes, ha ganado impulso gracias a la innovación tecnológica y regulatoria, así como a la incorporación de nuevos actores en el ecosistema financiero. Según el informe, el 48% de los expertos cree que el Open Finance será un estándar en el mercado antes de 2030, y el 20% ya considera que lo es actualmente.
Barreras para la adopción del Open Finance
El ritmo de adopción del Open Finance varía según las regiones y está influenciado por dos factores principales: la falta de apetito del mercado, mencionada por el 26% de los consultados, y las disparidades en los marcos regulatorios. A pesar de que en el 17% de los casos ya existen agendas regulatorias que abordan este nuevo modelo, en un 13% de las regiones todavía no se ha desarrollado un marco normativo expreso para habilitarlo.
Uno de los mayores retos identificados por uno de cada cuatro expertos es la protección de los datos y la privacidad. Este aspecto es crucial para implementar de forma segura las finanzas abiertas. En este contexto, la Unión Europea está trabajando en la creación de un marco regulatorio que permita un acceso seguro a los datos de los clientes, sin comprometer la confianza de los consumidores ni la seguridad de los sistemas financieros.
Desconfianza de los consumidores
El informe también señala que los consumidores europeos son especialmente reticentes a compartir sus datos financieros. A pesar de los beneficios potenciales del Open Finance, los usuarios necesitan más incentivos claros para compartir sus datos. En España, por ejemplo, más del 54% de los usuarios estaría dispuesto a compartir su información financiera si esto les ofrece reducciones o eliminación de comisiones y otros gastos de gestión. A nivel de confianza, los consumidores siguen depositando mayor credibilidad en la banca tradicional para manejar sus datos.
Marco normativo PSD3
El próximo marco normativo PSD3, que se implementará en la UE, establecerá nuevos derechos y obligaciones para el intercambio de datos financieros. Este marco busca reforzar las herramientas de control tanto para consumidores como para empresas, permitiendo que los usuarios tengan un mayor control sobre sus datos. Algunas de las medidas propuestas incluyen:
- La posibilidad de que los clientes compartan sus datos financieros de manera segura con terceros.
- La obligación de los titulares de los datos de ponerlos a disposición de los usuarios bajo control y supervisión.
- La estandarización de los datos y las interfaces de acceso.
Un desafío de la protección de datos
El Informe Open Finance de Minsait Payments muestra que, aunque el Open Finance está avanzando y tiene el potencial de transformar el sector financiero, su expansión depende en gran medida de cómo se resuelva el desafío de la protección de datos. El desarrollo de un marco regulatorio claro y seguro, como el PSD3, será fundamental para aumentar la confianza de los consumidores y garantizar que los beneficios de las finanzas abiertas se materialicen sin comprometer la seguridad de la información.