- El plan busca garantizar la igualdad de género en el ámbito cultural y aplicar la perspectiva de género de manera transversal.
- Se articula en cuatro ejes: igualdad de oportunidades, visibilidad, formación y prevención de violencias machistas, con un total de 46 acciones específicas.
- Incluye medidas ya en marcha como la Unidad de Atención y Prevención de Violencias Machistas en el Sector Audiovisual y Cultural.
- El Observatorio de Igualdad de Género supervisará su implementación y seguimiento.
Un avance hacia la igualdad de género en la cultura
El Ministerio de Cultura ha lanzado el primer Plan de Igualdad en la Cultura 2024-2026, un proyecto pionero diseñado para garantizar la igualdad de género en el ámbito cultural y aplicar la perspectiva de género en todas las acciones de la institución y sus organismos adscritos. Durante la presentación, que tuvo lugar en el Auditorio Jorge Semprún del Ministerio, intervinieron el ministro Ernest Urtasun; Jazmín Beirak, directora general de Derechos Culturales; y representantes del Observatorio de Igualdad de Género, como Guadalupe Balaguer y Irene García.
El ministro Urtasun destacó el carácter inclusivo e interseccional del plan, orientado a reconocer sin sesgos la labor de todas las mujeres en el ámbito cultural, desde creadoras y artistas hasta técnicas y funcionarias. Según sus palabras, este plan es una herramienta para “dotar de perspectiva de género a todas las acciones del Ministerio de Cultura” y garantizar que la igualdad sea el eje central del Plan de Derechos Culturales.
Cuatro ejes de trabajo para el cambio
El documento establece cuatro ejes principales:
- Igualdad de oportunidades: Reducir la brecha económica y la precariedad laboral de las trabajadoras culturales.
- Visibilidad y reconocimiento: Destacar el papel de las creadoras, incluidas mujeres migrantes, racializadas y rurales.
- Formación y conocimiento: Promover la capacitación en igualdad de género interseccional y mejorar el diagnóstico del sector cultural.
- Prevención de violencias machistas: Crear entornos seguros y libres de violencia, incluyendo protocolos de prevención y una unidad específica para el sector audiovisual y cultural.
Entre las medidas concretas destacan la incorporación de la perspectiva de género en las subvenciones y contratos públicos, la creación de una guía educativa para difundir el trabajo de creadoras, y un informe sobre la representación de mujeres racializadas y migrantes en el ámbito cultural.
Integración en el Plan de Derechos Culturales
El Plan de Igualdad se enmarca en el Plan de Derechos Culturales, cuyo objetivo es garantizar el acceso igualitario a la cultura y proteger la diversidad cultural. Según Jazmín Beirak, abordar la igualdad de género desde esta perspectiva implica transformar la cultura en un espacio que refleje la pluralidad de la sociedad.
Además, el plan incorpora iniciativas en marcha como el Protocolo de Prevención del Acoso Sexual por Razón de Sexo y la Unidad de Atención y Prevención de Violencias Machistas, creada en colaboración con la Academia de Cine.
Un proceso de elaboración colaborativo
El plan es el resultado de un proceso en dos fases: análisis del trabajo previo del Observatorio de Igualdad de Género y la recopilación de propuestas en colaboración con asociaciones y expertas de diversos sectores culturales. Estas contribuciones han permitido estructurar un diagnóstico de la situación de las mujeres en la cultura y definir 46 acciones concretas para abordar las desigualdades.
El Observatorio de Igualdad de Género, que supervisará la implementación del plan, tiene una trayectoria que incluye la elaboración de estudios, informes y herramientas como Cultura x Igualdad. En 2024, se actualizó su normativa para incluir la prevención de violencias machistas y ampliar la representación de sectores como el libro, el cómic, los videojuegos y las mujeres migrantes.
Hacia una cultura más justa
Este plan refuerza el compromiso del Ministerio de Cultura con la igualdad y la diversidad en el sector cultural, promoviendo medidas concretas para garantizar que la creación, el acceso y la participación en la vida cultural se den en condiciones de equidad real.